Cuando Jamaica logró su independencia política al final de los años 60, esta pequeña isla del Caribe era un lugar exótico pero empobrecido. Pero en un lapso 20 años Jamaica logró salir de su abandono debido a un nuevo ritmo: el Reggae.

Jamaica trae su música a Hannover, por medio de la presentación comunitaria de CARICOM. La exposición mantiene los colores rasta: el verde, el rojo y el dorado. El ackee, árbol típico de la isla, aquí no es real, pero sus frutos de todos modos son una delicia. Jale uno de los frutos hacia usted y -¡escuche!- Podrá oír Reggae en muchas de sus variaciones.