Piedra caliza, adoquines y corcho - Portugal sólo utiliza elementos naturales en las fachadas de su pabellón. Los típicos azulejos, en este caso barnizados de azul y amarillo, y el corcho biodegradable, demuestran qué importancia se le atribuye a la tradición y a las consecuencias futuras de las acciones humanas.

Hace varios siglos que en Portugal se extrae el corcho de la corteza de los árboles. Los árboles pueden ser desprovistos del todo de su corteza cada ocho o diez años.

Dos árboles de corcho en la plaza frontal señalan la entrada a la construcción del pabellón, cubierta por un techo ondulado y transparente.

Sobre una pantalla panorámica se proyecta el modo en que se extrae y elabora el corcho, algo en lo que Portugal es líder a nivel mundial. También se presentan las reservas naturales, que representan en total un quinto de la superficie del país.

Después de la EXPO, el pabellón, diseñado por Álvaro Siza y Souto Moura, se volverá a contruir en Portugal